jueves, 2 de abril de 2020

Es el momento de ser exigente con el aislamiento social

Ayer señalé que hoy se estarán informando unos 380 nuevos casos de personas contaminadas, Solamente se informaron 373.
Para mañana se indicado 450. Vamos a ver que sucede.
El asunto es que si mañana se acercan a las 450 nuevos contagiados, la situación prácticamente se duplicará hacia fines de mes, entonces es hoy el momento en que se debe ser exigente con el proceso de aislamiento social, ello con la finalidad de intentar moderar el crecimiento diario de personas contagiadas.
Se debe considerar además que, un porcentaje de las nuevas personas contagiadas van a requerir un tratamiento intensivo y la capacidad no es ilimitada, más bien es reducida para la cantidad de enfermos que puedan necesitar de esos cuidados intensivos.
Voy a insistir en no comprar en el comercio ambulante. Ese comercio es una completa falta de respeto a los miles de trabajadores de la salud que están luchando cada día para cuidar a sus pacientes. Al menos contribuyamos con esa conducta, NO al comercio ambulante.
Una nueva medida que se puede adoptar, es modificar el límite de velocidad tanto en carretera como urbana. El objetivo es reducir la cantidad de accidentes graves y que distraigan recursos médicos dedicados al combate contra el Covd-19.
Reducir la velocidad, puede no disminuir los accidentes, pero puede reducir los daños en las personas y por ende en los cuidados o atenciones médicas que necesitará.
Pareciera que viene una gran ola de enfermos y todas las acciones que se puedan implementar van a coadyuvar a disminuir el volumen de esa ola. Ese es el objetivo que se debe alcanzar.
Todos tenemos una responsabilidad en este desastre sanitario. Si los trabajadores de salud tienen la obligación de cuidar a sus pacientes, nosotros tenemos la responsabilidad de no exponernos al contagio y quienes se hayan contagiado, no contagiar a otras personas.
Si todos asumimos nuestra responsabilidad, el daño va a ser menor. El daño material y económico me refiero. Este daño se puede recuperar en algún momento. Pero el daño por la pérdida de las personas que van a fallecer, no se podrá recuperar.

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