sábado, 6 de octubre de 2012

Disyuntiva frente a la planificación

Para muchas personas tal vez puede resultar un poco dificultoso comprender las ventajas de desarrollar un plan en el cual se incluyan las acciones que deben efectuarse para enfrentar una situación de crisis.
Sin embargo estimo que mas dificil debe ser enfrentarse a una crisis y no haber previsto ninguna situación para enfrentarla. En otras palabras la enfrentamos de manera improvisada y evidentemente con resultados altamente inciertos.
Todas las organizaciones deben enfrentar durante el curso de su existencia, una o más crisis, de mayor o menor magnitud, pero crisis al fin y al cabo, y que debieran ser enfrentadas de manera normalmente  organizada, para tener los resultados que puedan hacer sobreponerse de una forma adecuada.
Es cierto que se puede sobrepasar una crisis de manera improvisada, con resultados desastrosos y aún así seguir trabajando y comenzar nuevamente prácticamente de cero, pero por cierto, esa no es la idea ni la mejor forma de sobrepasar una crisis.
Lo importante es planificar, planificar y planificar en forma exhaustiva, la forma de como se va a actuar frente a una situación de crisis. Si un ejecutivo dispone una situación y otro dispone una diferente, no se estará actuando correctamente. Puede ser incluso que se esté aumentando el daño al actuar de manera descoordinada.
Nuestra conducta normalmente es actuar de manera reactiva luego de haber soportado una emergencia, por pequeña o grande que sea para la organización, tenemos poca o ninguna disposición a planificar la forma de actuar frente a aquellos situaciones que pueden -incluso- ser determinantes para la organización. No tenemos la vocación de trabajar en forma proactiva.
En nuestro sitio web www.plandeemergencias.com disponemos de más de diez aplicaciones de software que le pueden ayudar en el trabajo de planificación para enfrentar situaciones de emergencias, allí tenemos aplicaciones para condominios, empresas e instalaciones de cualquier naturaleza, para municipios, para oficinas, para aprender a evaluar riesgos, para desarrollar protocolos de actuación, para confeccionar planes de continuidad de operaciones, y varios otros.
El mejor tiempo para trabajar en la planificación es hoy, justamente cuando disponemos del tiempo y la tranquilidad relativa, para prepararnos para la próxima situación de emergencias, que con seguridad mas temprano que tarde tendremos que enfrentar, y en la cual podamos poner a prueba nuestro trabajo de planificación, y mejorar luego, aquello que sea posible de hacerlo.
Respondiendo a la interrogante planteada al comienzo, resulta evidente entonces, que tendremos más tranquilidad de sobrepasar adecuadamente una emergencia si hemos efectuado un trabajo de planificación que si no lo hubieramos realizado. Ciertamente estaremos más tranquilos.

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