sábado, 20 de agosto de 2011

Prepararse para el peor escenario posible

Es la ideas que transmitieron los integrantes de la delegación de Japón que ayer participó en el simulacro desarrollado en Antofagasta. Es la idea que todas las organizaciones también debieran internalizar.

Estaremos preparados para un sismo y terremoto como el ocurrido en Valdivia en Mayo de 1960??? . Pensemos que pueda ocurrir en la zona central del país o pueda ser el que se espera para el Norte Grande???.

Los daños materiales serían cuantiosos, mucho más de los del 27 de Febrero, las victimas podrían sumarse por centenares o tal vez algunos miles. Estaremos preparados para una situación de esa naturaleza.

¿Existen albergues suficientes?

¿Cómo se podría efectuar el manejo de cadaveres?

¿Cómo se va a financiar la reconstrucción?

¿Los hospitales tienen personal y las camas suficientes para la atención de heridos? ¿Y ellos mismo tiene planes para evacuar si colapsa su edificio?

¿Los efectivos militares saldrán de inmediato a las calles para proteger el orden público? (¿Ayer en el simulacro habrán salido a la calle?)

¿Que ocurre luego si se genera un maremoto?

¿Y, si ocurre un fuerte terremoto en horas laborales?

¿Qué ocurre con el abastecimiento de bienes de primera necesidad?

Estas y decenas de otras interrogantes similares son las que deben estar respondidas antes de enfrentar una situación de emergencia de las características como la del mes de Mayo de 1960. Han pasado mas de 50 años, más de medio siglo, y el país aún no se encuentra preparado para una emergencia similar.

Hay que ponerse en el peor escenario. El de 1960 es el peor escenario conocido en el país y claramente hasta el 27 de Febrero de 2010, no estabamos preparados a pesar de todas las declaraciones en contrario antes de dicho acontecimiento. Y de los varios terremotos ocurridos en el lapso de tiempo.

El sismo de 1960 ocurrió y si los daños no fueron mucho mayores fue por el esfuerzo de muchas personas que evitaron que la ciudad de Valdivia fuera arrasada por el agua acumulada luego del terremoto.

Un momento para la reflexión, terremoto en Concepción el día anterior, terremoto en Valdivia, maremoto posterios y en los días siguientes nuevos terremotos y evitar que el lodo arrase Valvidia, ¿se podrá pensar que no es un escenario conocido?. ¿Sera entonces adecuado ponerse en una situación similar?. Pienso que si.

Otros pueblos y ciudades no estan lejanos a una situación similar o peor. Desde aquellos años hasta hoy las empresas y sus instalaciones industriales han aumentado en forma considerable, por ejemplo puede ocurrir un gran incendio industrial de sustancias químicas; que colapse una represa; graves incendios poblacionales, son todas situaciones factibles que pueden suceder y para se debe estar preparados, no en un nivel central. En el lugar en donde pueden ocurrir esos hechos.

Ejercitarse en un simulacro es muy bueno, pero aquí también es valedero ponerse en la péor situación. Se debe destacar lo bueno, es necesario y se debe tratar de mantener. Pero más se debe destacar lo que no se hizo bién, lo que faltó por hacer, lo que se debe mejorar, no con el afán de criticar, sino con el objetivo de tener una mejor preparación, para que, cuando se presente la oportunidad, los daños a las personas sean lo más bajo posible.

editor

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