Luego del terremoto y posterior maremoto, con seguridad se realizaran simulacros de situaciones de desastres en varias ciudades.
Descontando ya la participación de todas las organizaciones que normalmente organizan y participan en esos simulacros, lo importante es saber quienes más debieran participar.
He presenciado varios simulacros y no deja de sorprender que muchas empresas y comercio minorista siga trabajando en forma normal como si nada, o cómo si ellos en el momento de una emergencia no fueran a ser afectados.
En una situación de emergencias todos van a sentirse afectados y en consecuencia todos debieran preparase para esos momentos participando en forma activa en esos simulacros de emergencias.
Las empresas y comercio minorista, deberían hacerlo por la sencilla razón que con ello van a poder ejercitar las actuaciones para esos momentos y saber por ejemplo cuánto tardarán en cerrar sus establecimientos, cuánto tiempo se tardaran en evacuar sus trabajadores las instalaciones y en general cuánto tiempo la empresa podrá tener a todos sus trabajadores e instalaciones a buen recaudo.
Pero si no participan, ni las personas que dirigen las empresas y comercio y tampoco los trabajadores sabrán lo que deben hacer para enfrentar con un relativo exito esos momentos, y en general solamente podrán -si tiene el tiempo- improvisar, lo que por cierto no es recomendable.
Entonces cuándo se realicen esos simulacros, no solamente deben participar los organizadores y otras pocas personas que muchas veces no lo hacen en forma tan voluntaria, sino que deben participar todos quienes de una u otra forma pueden verse afectados por una situación de emergencias.
No basta con saber lo que se debe hacer, también se debe practicar. Por donde se evacuará, cuánto tiempo va a tardar, cómo estarán los caminos, y muchas otras interrogantes que un simulacro puede ayudar a despejar.
Entonces cuando en su ciudad se efectue un simulacro, y aún cuando su empresa o negocio no se encuentren entre los participantes oficiales, también haga su propio simulacro, pues será un importante tiempo ganado, para cuando -eventualmente- deba actuar en la realidad.
Le aseguro ciento por ciento, que el tiempo dedicado al simulacro, será un beneficio para su empresa. Sabrá que tiene que hacer más cosas de aquellas que se imagina, recordando además que luego de la emergencia, y más temprano que tarde su empresa o establecimiento comercial deberá volver a a trabajar normalmente.
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