viernes, 29 de junio de 2012

No somos tan vulnerables I

Hace un tiempo comentaba sobre la vulnerabilidad para hacer frente a sismos de regiones distantes respecto de nuestra situación local. Y considerando la construcción de nuestros hogares estamos en una mejor forma que esas regiones lejanas.
Ahora bién, ello no puede ser un consuelo, si es una situación concreta. Se construye bien.
Para mejorar esa situación se debe trabajar en otros aspectos, como por ejemplo la planificación del trabajo para enfrentar sismos que pueden ser acompañados de maremotos tanto a nivel de comunidad como a nivel familiar. Si muchas familias disminuyen sus aspectos vulnerables, mejora la situación de la comunidad.
Acciones para disminuir la vulnerabilidad son variadas el kit de emergencias, un botiquin con elementos de primeros auxilios, luces de emergencias, conocimiento de los lugares riesgosos el hogar, etc. etc.
Me quiero detener en un aspecto que se trabaja en los simulacros de esta situaciones de emergencias, sismos y maremotos, cual es la zona de seguridad.
En primer lugar comentar que generalmente para gran parte de las personas un lugar seguro es el hogar, y para estas situaciones tambien debiera serlo. Si frente a un terremoto la persona puede sobrepasarlo en su propio hogar bien, allí debe permanecer, Si no le es posible permanecer en su hogar dirigirse a un lugar que estime seguro, que puede ser incluso el patio de su hogar. La idea en definitiva es ubicarse en un lugar que se estime proporciona seguridad respecto a la integridad fisica.
Si la persona se encuentra habitando en un edificio, y ha pasado otros terremtos allí, ese es su lugar seguro, conozco a muchas personas que incluso con un sismo fuerte como el del 27F, no se mueven de sus departamentos y apenas abren la puerta cuando se les pasa consultando si han tenido problemas o si esta todo bién, y son generalmente personas mayores y muchas de ellas, solas.
Si es con respecto a un maremoto, la zona de seguridad estará dada por la altura en la que se encuentre, y también debe considerarse que las zonas inundables que son publicadas por las autoridades, no quiere decir que toda esa zona se vera inundada en la misma magnitud, las zonas cercanas a la costa seran mas peligrosas pero las zonas alejadas lo serán menos. No será lo mismo un edificio ubicado a cien metros del mar que uno ubicado a 500 metros.
Lo que quiero establecer es que las personas deben permanecer en el lugar que se sientan seguros en atención a que si una persona se siente segura en su hogar, y la obligan a salir de él y alejarse a un lugar que para ella es totalmente desconocido, aún cuando sea en la misma ciudad, va a aumentar su vulnerabilidad pues además de no estar preparada para caminar -eventualmente- en medio de escombros y con mas personas alrededor, lo más probable es que en su fuero interno, aumente en forma notoria la sensanción de inseguridad, que es precisamente lo que se desea disminuir. Ella se va a sentir muy expuesta.
Se debe tener presente, que si en una ciudad colapsan uno ó más edificios que han sido construidas con exigencias antisimicas, las construcciones que no lo hayan sido, generalmente construcciones antiguas, también habrán sufrido muchos daños.
Algunas personas van a querer alejarse de sus hogares y principalmente de las zonas de inundación por un eventual maremoto, pero si ello no es inminente la zona mas segura es la cercania de su hogar.
Obviamente esta situación es para las ciudades en que existan edificios en altura, Si su hogar es una casa ubicada cercana al mar y usted piensa que va a existir un riesgo de maremoto, lo mas sensato es dirigirse a zonas elevadas.  
Finalmente la definitivo, no existe una receta unica para enfrentar terremotos y maremotos, ello estará en gran parte definido además de la magnitud del terremoto, por la ubicación en la que se encuentre cada persona, de la fortaleza de su espiritu, del conocimiento que tenga del lugar en que se encuentra y de su calma para reconocer si se encuentra en péligro o no.

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