Solamente unos dos minutos antes de ocurrido el sismo de ayer, le estaba comentando a uno de mis hijos, sobre los diversos sismos que se habían dejando sentir durante los últimos días en varias regiones de nuestro país, cuando se comenzó a sentir el movimiento en forma bastante suave, pero luego muy extenso.
En el sur sismos de hasta 5.9 Richter, lo mismo en el norte grande, sismos de hasta 5 grados. Era más que esperable que en el centro se dejara sentir un movimiento sismico, más bien era extraño que no se hubiera sentido alguno.
Si bien es cierto, las replicas se han dejado sentir en lugares cercanos al epicentro, también resultó extraño el no haber sentido alguna replica en regiones más alejadas y en las cuales también se sintió el sismo principal.
Lo importante es que no ocurrió ninguna desgracia personal. Los daños materiales son -generalmente - recuperables.
Lo que llama la atención es la tardanza para poder conectarse con los sitios que manejan la información sobre los sismos, como el shoa y sismología. Se saturan de inmediato, y en un país tán sísmico como el nuestro, ello debiera estar analizado.
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