En los últimos días se han acrecentado las inquietudes sobre lo que puede acontecer el próximo 21/12/12, y muchos comentarios son preocupantes.
Personalmente creo que no va a ocurrir ningún desastre global como muchos esperan o temen, razón por la que en lo que sea posible, se hace un llamado a la tranquilidad.
Esta situación puede terminar derivando desde una sicosis generalizada -que ya creo lo es- a convertirse en un grave problema de protección civil como los conocidos luego del terremoto del 27 de Febrero, razón por la cual algunos organismos públicos que deben estar preocupados por la seguridad de las personas, debieran al menos comenzar a levantar la voz y llamar a la calma.
La protección civil no es solamente terremotos, maremotos, incendios forestales, es mucho más que ello.
Es además necesario poner el dedo en la llaga, y señalar que como población no estamos preparados ni de lejos, para enfrentar situaciones anormales, y quienes comentan por la TV, no ayudan mucho. Es entonces un momento oportuno para refleccionar sobre ello y adoptar las medidas que sean necesarias para modificar el rumbo.
Si algo positivo es posible extraer de la situación actual, es la toma de conciencia de la población de estar preparados, pero no por que pueda suceder en los próximos días, sino para estar permanentemente preparados como una forma de autoprotección, idea que hemos venido comentando hace ya bastante tiempo.
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